lunes, 21 de diciembre de 2009

Divagando



    
    La vida va transcurriendo en este difícil sentido de sí misma. Es como pretender dejar atrás lo ya vivido e intentar emprender una nueva ruta usando el camino de vuelta queriendo volver a empezar, aun sabiendo la imposibilidad de tal pretensión.


     Cuando te das cuenta de que no sirve de nada aferrarse tanto a lo material en cuanto a lo espiritual puedes entonces llegar a pensar que quizás sea demasiado tarde para asimilar que tienes que envejecer con suficiente dignidad y, ¿por qué no?, incluso llegar a enfermar.


       Siempre ha de parecernos injusto lo que el destino nos tenga preparado. Más, si cabe, si esto le sucede a alguien a quien quieres y que en este transcurrir de la vida va por delante de ti aun a pesar de lo realmente egoistas que podemos ser en lo más profundo de nosotros mismos y tanto nos cueste reconocerlo. 


Fractal I




viernes, 18 de diciembre de 2009

Nos observa




     Siempre escondida pendiente de lo que hacemos, La Muerte nos está rondando a la espera de ponernos la zancadilla cuando menos lo esperemos.
   Nunca debiéramos pensar en proyectar de cara a este futuro incierto pretendiendo dejar las cosas pasar como queriendo creer que más tarde que pronto nos tiene que llegar.
     Quizás si nos tomáramos la vida de otra manera no habríamos de 
marcharnos con la sensación de no haber llegado. 
   Haz lo que debas, pero haz el favor de no complicarte la existencia. Piensa que lo mismo mañana no amanece para ti y tú solamente serás el culpable de haberte perdido todo aquello de lo que no has sabido disfrutar, tal vez porque estabas muy ocupado montándole la vida a todo el que te rodeaba sin preocuparte de construir la tuya propia.
   Vive y deja vivir. Te advierto que Ella está ahí; siempre a la espera, siempre acechando.
     Puedes pensar que ésas cosas sólo le pasan a los demás   porque,  recuerda, los demás eres tú.